Conductas singulares de los gatos

La etología o ciencia del comportamiento animal, nos ayuda a disminuir los mitos que se manejan frente a ciertas conductas singulares o raras de nuestros gatos, las cuales muchas veces nos hacen pensar que son seres extraños o de otro planeta. Así que en este artículo veremos porqué no son tan especiales y porqué por lo tanto tienen una lógica o razón de ser. Luego de leerlo podrás terminar pensando: ¿Cómo no se me había ocurrido antes?

Así que comencemos ¿alguna vez has visto a tu gato cubrir la comida, así como cubre sus necesidades en el arenero? Resulta que tapar la comida es una conducta instintiva y es normal, siempre y cuando no se convierte en un conducta compulsiva o que denote estrés. El gato lo hace porque considera que su alimento está en peligro de ser robado por algún depredador y considera que si la deja al descubierto, esto puede atraer muchos competidores y colocarle en peligro. Por lo tanto, para mejorar esta situación, debemos analizar si el sitio donde estamos colocando el alimento de nuestro gato es inseguro, ya que si estamos ubicando su comida cerca a ventanas, puertas, balcones o si la cantidad es muy poca, posiblemente sea la razón por la cual actúa de esta manera. Para mejorar esta conducta, podemos colocar varios comederos en la casa en lugares seguros que no permitan que otros animales vengan a comer allí, eso sí, teniendo en cuenta que aumentamos los comederos, pero no las cantidades de comida, para evitar obesidad. De este modo nuestro peludo sentirá que por ningún motivo va a tener escasez o pérdida de su alimento.

También puede ser que hayas observado que tu gato ubica su ratón de juguete en el plato de la comida o cerca a este; esto lo realiza porque considera que ese ratón es la presa que acaba de cazar. Lo mismo sucede cuando te lleva el ratón y lo coloca en tus pies o debajo de tu cama; en esta situación te está enviando el mensaje que te invita a jugar a los cazadores o te está diciendo que te va enseñar a cazar y que te está dejando esa presa en tu madriguera ya que es un lugar seguro para esconderlo.

Otra conducta singular es la de humedecer sus patas en el bebedero y luego lamerlas, o derribar el bebedero y tomar agua del charco que está acción produce. En muchas ocasiones cuando este sucede, nosotros como humanos, pensamos que él lo hace para molestarnos o porque es desaseado pero ninguna de ellas suele ser la explicación. Él lo hace usualmente por alguna de las siguientes razones: está muy aburrido y encontró un nuevo pasatiempo, el recipiente del agua le resulta incómodo, porque es muy pequeño y le molesta en sus bigotes,  le huele mal y necesita que se lo limpies o el material del recipiente hace que el gato se refleje en este y esto lo asusta y por ello le genera la necesidad de voltearlo. 

Otra situación común es que tu gato tome agua de la ducha o del grifo. Esta conducta se genera porque a todos los gatos les parece placentero y agradable beber agua que corra, fresca y que tenga buen oxígeno y el agua del bebedero quizás lleva mucho tiempo allí, está mezclada con saliva, pelos y polvo del ambiente, por lo tanto ya no es placentera para el gato. Sinembargo no deberíamos permitirle que tome agua de la ducha, el sanitario o del pantano porque ésta tiene bacterias, químicos derivados del jabón o de los limpiadores del aseo y todo ello puede perjudicar la salud del gato. Si se acostumbra solo a tomar agua de estos lugares y se queda solo por largo tiempo, no tendrá manera de conseguir agua en dichos lugares y por ende dejará de hidratarse por lo cual afectará su sistema renal. Así que para solucionar esta situación es bueno proporcionar una fuente eléctrica, agua helada, agua limpia diariamente y recipientes de agua muy cómodos, aseados y que no generen efecto de espejo para el gato.

Algunas conductas que también se presentan y nos generan inquietud a los humanos, son cuando el gato amasa o succiona la cobija, un muñeco de felpa, un cojín, una almohada o el abdomen de sus propietarios. Esto tiene una explicación y es que el gato está emulando un momento de lactancia ya que el cachorro ejerce presión sobre la barriga de la mamá gatuna con sus patas delanteras, para así generar la salida de la leche materna y por lo tanto, se dice que esta conducta de masajear y succionar la cobija, se evidencia en gatitos que fueron destetados antes de completar su etapa de lactancia. No te preocupes, es una situación normal que debemos permitir que el gato realice y es de anotar que esto solo ocurre cuando el gato está tranquilo y a gusto; lo que no se debe permitir es que el gato se coma o ingiera pedazos de la cobija o de tela ya que conllevaría afecciones en su organismo. 

Otra situación particular con la cobija, es que la coloque debajo de sus cuatro patas y la arrastre de una punta con la boca pues resulta que en el hábitat silvestre, cuando un felino caza una presa de gran tamaño, antes de disfrutar de su manjar, el sabe que ese olor que genera la presa muerta, va a generar la llegada de otros depredadores, por lo tanto si no la oculta es posible que sea hurtada. Entonces el gato rápidamente analiza un lugar seguro para esconderla pero como la presa es muy grande se le dificulta transportarla así que debe ejercer presión en el cuello de la presa con sus mandíbulas. Así que el gato entiende en esa cobija, almohada o calcetín, que es una presa y necesita llevarla a otro lugar donde considere que estará segura y casi siempre lo hace al lado del plato de la comida o incluso al interior del comedero; porque como el a diario observa que encuentra su comida allá de forma permanente, entonces según su lógica, ese es el lugar más seguro de todos para proteger y conservar su presa.

También es posible evidenciar que nuestro peludo simula copular con la cobija, así sea un gato castrado, pues está conducta está representada en que el gato toma una cobija, pedazo de tela o un muñeco de felpa, la enrolla y la monta estimulando su zona genital durante pocos minutos y acto seguido se acuesta al lado de la tela o peluche y lame sus genitales, simulando de esta manera el apareamiento felino. Por lo tanto se hace el análisis de que si el gato está teniendo este tipo de comportamiento quizás es porque su organismo ya comenzó a generar actividad hormonal de tipo sexual, y si el caso se da en un gato esterilizado es posible que tenga alguna dificultad hormonal y sea necesaria una evaluación por el médico veterinario para verificar que la castración haya quedado bien hecha. Si la conducta comenzó antes de la castración, ya posiblemente el gato había iniciado su actividad sexual y descubrió una conducta placentera con la cobija o similares y lo grabó en su mente, convirtiéndola en su hábito, por lo que cada vez que tiene contacto con dichos elementos lo lleva a generar dicho comportamiento. Así que no lo debemos regañar o sancionar cuando lo veamos haciéndolo, ya que lo único que estamos haciendo es transferir nuestros prejuicios y el gato no comprende por qué razón lo estamos regañando y deja de confiar en nosotros.

Y ya para finalizar, analizaremos la acción de esconderse debajo de las cobijas, cubrelecho o similares. Esto lo hace por algunas de las siguientes razones: porque está estresado y quiere pasar desapercibido, porque está huyendo de un peligro, por ejemplo cuando llegan personas extrañas a la casa; así que en ese lugar se siente refugiado y protegido. Otra razón de ese comportamiento puede ser porque tiene frío, sobre todo cuando duerme mucho, ya que esto genera que baje su temperatura corporal y lo mejora el calor de la cobija. También puede esconderse en la cobija cuando está en modo juego, por ejemplo cuando estamos ordenando la cama o cuando estamos metidos debajo de la cobija y movemos los pies y las manos, y como el gato es perfecto detectando calor y movimiento, está acción nuestra le insinúa a él que es la hora de cazar.

Esperamos que todo esto que te explicamos de las conductas singulares de los gatos, te ayude a entender un poco mejor que sucede con nuestros felinos y así poco a poco eliminar los mitos y dudas frente a sus comportamientos y de esta manera acercarnos a la comprensión de su comportamiento mucho más desde el amor y el respeto por su naturaleza.

La agresividad en los gatos

Los gatos son animales independientes y afectivos, muchos de ellos no son tan sociables como los perros y algunos no toleran mucho el contacto. El grado de tolerancia al contacto depende de cada gato. Algunos gatos permiten que se les toque mucho tiempo, por todo el cuerpo y cuando ya no lo desean, se van.

Los gatos que no les agrada mucho el contacto frecuente, pueden hacerlo saber mediante señales como movimiento rápido de cola, lamerse a sí mismo como forma de apaciguamiento, dilatación súbita de pupilas y leve movimiento de las orejas hacia atrás y finalmente, mordiscos hacia quien lo sigue tocando a pesar de los comportamientos por los que expresa que no quiere continuar el contacto.

El hecho de que a un gato no le agrade que le estén tocando, no quiere decir que no le agrade estar cerca de su amo.

¿Cómo se puede tratar  la agresividad en gatos?

La terapia de juego es una buena forma de tratamiento para que el gato y el dueño mejoren su relación, se puede empezar con juegos a distancia donde las manos no estén cerca del felino. Las cañas de pescar, cajas, puntero láser son algunos métodos de este tipo de juego.

Agresividad hacia desconocidos 

Algunos gatos son agresivos hacia los desconocidos, lanzan bufidos, arañazos, o mordiscos, el origen de dicho actuar se explica en que son gatos que no toleran el contacto, son inquietos y curiosos, pero el contacto físico repetitivo mediante caricias de las personas con el gato origina que éste muerda, arañe o bufe, lo que causa que el amo lo regañe, lo encierre o le pegue, al no comprender el porqué del comportamiento de su gato.

Si el gato ya se ha enfrentado a muchas situaciones similares, terminará gruñendo ante todas las visitas que lleguen a la casa. Por eso, los familiares y visitas deben ignorar al gato, no mirarle a los ojos y evitar todo contacto físico con él que pueda irritarle. 

No es recomendable que el dueño lo cargue para que las personas lo vean pues esto agrava su miedo y reacciones agresivas. En caso de que el gato lance grandes agresiones, lo mejor es utilizar un spray con agua sobre él y apartarlo.

En ocasiones, la agresividad de un gato también se debe a que es muy nervioso y al mínimo contacto reacciona a la defensiva, si este es el caso de su felino, es mejor que cuando haya vistas en casa, se quede en una habitación donde se sienta cómodo hasta que las visitas se vayan.

La convivencia entre perros y gatos es posible

Desde hace muchos años existe la creencia errónea de que perros y gatos no se llevan bien y no pueden convivir en un mismo espacio, no siempre es verdad. Se conocen casos de perras que han amamantado a gatos recién nacidos y gatas que han hecho lo mismo con cachorros de perro.

Si nuestro perro o gato está acostumbrado a ser el centro de atención en la casa y de repente llega un nuevo compañero peludo, es normal que sienta recelo o temor y haya conductas agresivas de ambos animales, pues son sensibles a los cambios, en especial a los del hogar.

Por eso es importante repartir la atención para ambos, demostrarles que ninguno será desplazado de nuestro cariño, esto hará más fácil el proceso mutuo de adaptación.

Algunos consejos del Pet Food Institute para facilitar la convivencia entre perros y gatos son:

Dejar que los animales se huelan; pero a través de una puerta cerrada.Luego, retirar al perro y permitir que entre el gato para revisar el lugar. Repetir esta actividad algunos días.

En caso de que el nuevo inquilino sea un perro que habitará el mismo espacio en el que vive un gato, es mejor que ambos animales estén separados una semana. Si ambos (sean perros o gatos) son cachorros, no habrá inconvenientes, se relacionarán con facilidad mediante juegos comunes.

Si hay mucha diferencia de edad entre los animales que convivirán juntos, es necesario acercar al más pequeño para que el adulto, que es dueño de la casa, lo vea y lo huela, sabrá que es un cachorro, y seguramente le brindará protección. También es ideal que ambos coman en el mismo horario, recuerde que a cada uno le corresponde “su comida”.

Cronología del rescate de una gata atrapada en el motor de un carro


Por: Carlos Andrés Naranjo-Sierra
10:00 de la mañana del miércoles 25 de septiembre: recibo una llamada en Santa Elena de parte de mi padre. Me cuenta que en el parqueadero del edificio donde viven, hay un gato atrapado en el motor de un carro y no para de llorar, quiere saber si yo puedo llamar a mis amigos animalistas. Le digo que me espere un momento y llamo a Alejandro Gaviria de la Patrulla de Protección Animal. Este a su vez me remite con el Centro de Bienestar Animal La Perla.

10:30: Llamo a a mi papá para contarle que ya contacté a Alejandro y al Centro de Bienestar Animal La Perla. Le cuento el caso a mi amiga Mónika Cuartas de la Fundación Cánelot quien le escribe a Etilvia Vallejo también de La Perla. Quince minutos después me llama el oficial encargado del carro de rescate para informarme que están en otro procedimiento pero que tan pronto terminen se comunican conmigo para coordinar. Toman dirección y teléfonos de la portería del bloque 7 de Suramericana.

11:00: Llamo de nuevo a mi padre y le digo que en el edificio donde viven, trabaja Sandra Arango, la directora de la Revista Con Cola, y que tal vez ella pueda ayudarnos. El portero localiza a Sandra la cual baja con su hermano a tratar de hacer algo por la gata, ya sabemos que es hembra y está preñada. Ponen gato, mecánico, y quitan una llanta del carro pero no logran ayudarla a salir. Parece que una parte del motor la tiene aprisionada desde la noche anterior.

1:00: Llega el carro de rescate del Centro de Bienestar Animal La Perla. No ha sido posible sacar la gata. Revisan y confirman que el animal está sin posibilidades de salir por sus propios medios. Un mecánico tendrá que desbaratar parte de la dirección del carro si la dueña del vehículo lo permite. Mónika Cuartas me llama a preguntar por la gata, le cuento que necesitaremos un mecánico. Ella, que ya subía a atender en nuestra tienda Doctor Pulgas, se devuelve por su mecánico de la Casa Alemana quien conocedor de su labor animalista accede a acompañarla.

2:00: Llega Mónika Cuartas con el mecánico. Comienzan a ver el escenario y no parece fácil, deben desconectar la dirección y unas mangueras para luego volver a ponerlas en su sitio. Ya se encuentran en el parqueadero una docena de personas: los tres funcionarios del municipio, Sandra Arango y su hermano, la propietaria del carro y su esposo, Miriam una empleada del servicio que decidió bajarle leche a la gata, Mónika Cuartas, el mecánico de la Casa Alemana, mi papá y mi mamá.

2:30: Sedan a la gata para evitar que se lastime durante el procedimiento teniendo cuidado de que sea breve la dosis para no afectar los fetos. Comienzan a retirar la dirección del carro. Nos enteramos que la gata habitualmente visita el edificio y es conocida por los vecinos. Debido a su estado de embarazo decidió «hacer nido» en el refugio «seguro» que le brindaba el motor.

3:00: Logran sacar a Motorina (ya tiene nombre la gata) que se encuentra débil pero alza la cabeza para tomar leche. Sandra Arango y Mónika Cuartas la reciben y verifican su estado, el cual es bueno en términos generales. El veterinario del CBA se asegura nuevamente de que el animal no pertenezca a ningún vecino y procede a llevárselo para que lo sometan a evaluación médica. Se vuelve a armar la dirección del carro y se hace vaca entre Mónika Cuartas, mi familia y yo pues la dueña decidió no correr sino con una tercera parte de la mano de obra del mecánico, que consciente del caso decidió cobrar sólo $60.000.

Ayer, 27 de septiembre, nos remitieron el siguiente informe del estado de salud de la gata:

«La paciente ingresó el 24 de septiembre de 2013 en estado de sedación por lo difícil de su rescate. Se toma muestra de sangre para extendido y pruebas  virales (inmunodeficiencia y leucemia felina), las cuales resultaron negativas. Se realizó el protocolo de ingreso, su condición corporal es baja.
Al día siguiente la paciente se encuentra decaída y renuente a comer, se decide pasar a OVH; queda en observación durante el día, su recuperación posquirúrgica es muy buena y se deja conectada con líquidos venosos. Hoy la paciente se recupera satisfactoriamente y a la espera de entregarse en Adopción.
Se decidió hacer la cirugía de esterilización debido a la baja condición corporal, lo traumático de su rescate y el decaimiento, lo que normalmente genera alta mortalidad en los fetos, además estuvo bajo efectos de sedantes. Lo importante es evitarle más desgaste fisiológico a la gatita con una lactancia y poder recuperarla».

Sandra Arango decide adoptarla «me hace muy feliz que nuestra Motorina se encuentre bien. Manifiesto mi intención de adoptarla y que venga a formar parte de esta Familia Con Cola, pues realmente siento una conexión especial con ella», dice. Esta es la cronología de un rescate con un final feliz para la gata y en el que se evidencia que es posible un mundo más amigo de los animales si coordinamos nuestros esfuerzos. También es una muestra de la importancia de esterilizar y de tocar la bocina del auto antes de arrancar, si se sospecha que en el parqueadero habitan perros o gatos. Algunos no corren con la suerte de Motorina.