Aprende sobre Psicología y Comportamiento Animal en C3

La comprensión de la psicología y el comportamiento animal son esenciales para develar los misterios de la naturaleza y entender mejor a nuestros amigos de cuatro patas, por eso C3 – Colegio de Ciencias del Comportamiento ofrece a todos los amantes de la etología, su Curso Psicología y Comportamiento Animal, donde podrás explorar temas que van desde la Teoría de la Evolución darwiniana, hasta los principios de etología en mamíferos, incluidos perros y gatos, y la relación entre el comportamiento animal y humano.

El Curso, que se llevará a cabo de manera virtual, ofrece una oportunidad única para que personas de todas las áreas del conocimiento aprendan sobre el comportamiento de los animales. Tanto si eres estudiante, profesional, amante de los animales o simplemente tienes curiosidad por entender mejor a las criaturas que nos rodean, este curso es perfecto para ti.

¿Qué puedes esperar del Curso en línea Psicología y Comportamiento Animal?

El curso «Psicología y Comportamiento Animal» ofrecerte una experiencia de aprendizaje enriquecedora alrededor de temas como: la teoría de la evolución y comportamiento; los principios de etología en mamíferos y la relación comportamiento animal y humano

¿Por qué deberías unirte a nuestro Curso?

El Curso Psicología y Comportamiento Animal, ofrece numerosos beneficios para los participantes como tú, entre los que se cuentan:

  1. Conocimientos: Obtén una comprensión sólida de la psicología y el comportamiento de los animales a través de un enfoque didáctico y accesible, respaldado por expertos en la materia.
  2. Flexibilidad: Como el curso es virtual, puedes aprender a tu propio ritmo y desde cualquier lugar que te resulte conveniente. No hay restricciones geográficas ni limitaciones de horario.
  3. Ampliación de perspectivas: Independientemente de tu área de especialización, este curso te permitirá desarrollar una visión más amplia y comprensiva del mundo animal, que puedes aplicar en campos tan diversos como la educación, la psicología clínica, la conservación y más.
  4. Interacción y colaboración: Conecta con otros apasionados por la psicología y el comportamiento animal a través de las redes sociales de C3 y comparte ideas, experiencias y reflexiones con una comunidad global de aprendices.

Inscríbete ahora y explora el mundo de la psicología y el comportamiento animal haciendo parte de la nueva generación en educación. No te pierdas esta oportunidad única. Regístrate con tus datos hoy mismo y prueba la primera clase gratis. Más información en el sitio web www.c3-edu.com.

¡Bienvenido C3 – Colegio de Ciencias del Comportamiento!

Las Ciencias del Comportamiento son la aplicación práctica de los avances de las Ciencias Cognitivas. La filosofía, la psicología la inteligencia artificial, las neurociencias, la antropología y la lingüística dan forma a un diálogo multidisciplinar que nutre campos como la etología, la economía, la política, la comunicación o el marketing en un árbol frondoso en el que todos los días se desarrollan nuevas ramas.

Abonando este árbol, en DOCTOR PULGAS apoyamos una nueva iniciativa educativa llamada C3 – Colegio de Ciencias del Comportamiento, desde nuestra perspectiva de la etología y el comportamiento animal, en aras de ofrecer Educación en línea de Alta Calidad a todos los profesionales hispanohablantes que deseen aprender sobre las Ciencias del Comportamiento y aplicarlo a su formación profesional y personal.

La humanidad enfrenta grandes retos comunes como la reciente pandemia por el Coronavirus SARS-CoV2 o la emergencia climática que todos los días avanza a pasos agigantados pero sin que nuestras decisiones y conductas se modifiquen significativamente debido a los obstáculos evolutivos que entraña para nuestra mente el avance lento del fenómeno.

Solo el conocimiento claro, juicioso y honesto de nuestras virtudes y defectos nos permitirá reconocernos junto con los demás animales que habitan la biósfera, para enfrentar juntos las amenazas y oportunidades de habitar un planeta con cientos de especies compitiendo y cooperando a la vez, viajando en esta extraña roca intergaláctica que atraviesa el espacio sideral.

C3 – Colegio de Ciencias del Comportamiento se constituye en una fuente de conocimiento para la discusión y la conversación racional y empírica desde la formación académica y humana, que emerge hoy en medio de la esperanza. Le deseamos buen viento y buena mar navegando con la confianza en hallar tierra firme. Para ver el avance de este barco, los invitamos a visitar el sitio web www.c3-edu.com

Diez consejos para educar a tu perro

Logrará que su mascota siga y cumpla sus órdenes y tenga un mejor comportamiento. Los caninos siempre aprenden gracias a la dedicación de sus propietarios. Por ello, más que un etólogo o un veterinario que, por supuesto, podrán enseñarle, las personas que viven con el animal son los mejores maestros.

Así lo explica Ingrid Michael, etóloga y propietaria de Dog Resort. En sus palabras, «los perros aprenden a través del condicionamiento clásico y el condicionamiento operante, teorías de Pavlov y de Skinner».

Explica que el clásico es cuando los perros aprenden por un estímulo, que genera en ellos una respuesta, por lo que reciben una recompensa. En cuanto al condicionamiento operante, se refiere a que el perro realiza algún comportamiento bueno y por ello recibe un refuerzo positivo (puede ser un comando de voz) para aumentar la frecuencia del mismo.

Aunque lo ideal es entrenar al perro desde que es pequeño, si el animal llega a sus manos ya siendo adulto, aún puede aprender aunque el proceso será más lento.

En cualquier caso, lo ideal es usar recompensas, para reforzar un comportamiento; y si lo que quiere es disminuirlo, utilizar correcciones sin que sean castigos severos.

Recuerde que los perros son animales de manada y deben aprender que el líder y los que dan las órdenes son los propietarios.

Un lugar para dormir
Desde que el cachorro llega a casa se le debe asignar el lugar donde pasará las noches. Por más que llore, no debe llevarlo a una de las habitaciones, pues es necesario que la mascota identifique y se acople al espacio que será suyo.

Llénese de paciencia
Los primeros días son los más duros. Para que el aprendizaje sea efectivo, todas las personas deben estar de acuerdo con lo que se le permitirá o no al animal, para no confundirlo.

Control de esfínteres
Si son cachorros, no podrán salir de casa hasta cuando tengan todas sus vacunas. Por esta razón, es necesario dejar un trozo de papel periódico cerca del lugar donde duermen y empezar a indicarle que ese es su lugar. Cuando ya esté más adulto, sí podrá llevarlo al parque.

Recompensas
Cuando el perro cumpla con cualquier indicación, que ya se le ha repetido, el propietario debe emitir un comando de voz que puede ser una palabra (siempre la misma) y luego premiarlo con algo que le guste, como una galleta. Siempre será mejor educarlos positivamente y no con castigos.

No se contradiga
Un gran error es ser permisivo con algo que no se quiere que el perro haga. Como son animales de manada, ellos deben entender que el alfa o líder son los dueños, y no él. Por esto, hay que ser constante con lo que se quiere lograr.

En las alturas
La cama y las sillas son espacios de altura, que para los perros indican dominio. Si usted no quiere que se suban a estos lugares, nunca lo permita. Bájelos cuantas veces sea necesario, pues si deja que sea así, el perro sentirá que ya tiene el control.

Cómpreles juguetes
Para evitar que los cachorros se distraigan con zapatos, ropa o muebles, manténgalos rodeados por juguetes, con los que sí podrá entretenerse. En el mercado también encontrará productos con un aroma que alejará al perro de esos sitios en los que usted prefiere que él no esté.

No le dé de su plato
Los alfa o líderes de la manada son los que comen primero. Por eso, el perro debe entender que primero comen las personas de la casa y luego, él. No deje que sus hijos lo alimenten con lo mismo que ellos comen, porque puede causar enfermedades en ellos o en el animal.

Establezca horarios
Usted debe fijar la hora de la comida y de ir al baño de su cachorro. No deje el plato con comida todo el día; solo en horas acordadas.

Al llegar a casa
No salude a su perro hasta cuando esté sentado y tranquilo. Si permite que se le lance encima, juega con él o lo deja ladrar, lo más seguro es que él aprenda a hacer lo mismo con los visitantes y extraños, lo que puede resultar incómodo.

Fuente: Eltiempo.com

El idioma de los perros

Desconocer los códigos de comunicación de nuestro animal de compañía puede interferir en la calidad de nuestra relación.

Sabiendo interpretar mínimamente su lenguaje y sus manifestaciones emocionales lograremos establecer un vínculo más fuerte.

Existen señales visuales, acústicas y olfativas que son utilizadas para relacionarse con sus congéneres, y son las mismas que utilizará en su esfuerzo por comunicarse con nosotros. Es importante que aprendamos a interpretarlas. Comprendida la idiosincrasia canina, educar a nuestro perro será una tarea mucho más sencilla, adaptada a lo que le trasmite su impronta genética y donde la socialización temprana jugará un papel importantísimo para lograr que pueda vivir en armonía con su entorno.


El lenguaje corporal canino: Un abanico de gestos

El lenguaje corporal canino es sumamente importante. Los humanos hemos perdido parte de esta habilidad por el desarrollo que hemos alcanzado con el lenguaje oral. El habla ha sustituido en las personas otras valiosas e interesantes formas de expresión que son fundamentales en la especie canina.

Al igual que nosotros, los perros tienen músculos faciales capaces de dar diferentes expresiones a la cara. Los labios pueden enrollarse hacia adentro, las orejas son extremadamente móviles, incluso algunos perros pueden levantar la cejas cuando están muy sorprendidos por lo que acontece a su alrededor.

La mirada, la posición de los ojos, los movimientos de la cola, los distintos gestos se combinan en el perro en diferentes secuencias estableciendo un complejo mosaico, que deberíamos tratar de descodificar.


El lenguaje corporal canino:
Ojos, orejas, cola, boca…

Los ojos muy abiertos nos trasmiten temor, la mirada fija puede significar desafío; una postura característica en los perros dominantes. Si a nuestro can le cuelga la lengua es que está relajado, las orejas hacia atrás denotan temor o una sospecha. Si en cambio permanecen erectas, es que está alerta ante lo que le rodea. Por cierto, si os muestra los dientes no necesariamente estará demostrando agresividad.

La cola en movimiento se traduce por una alegría difícil de disimular. Aunque hay que tomar en cuenta que en ocasiones puede querer trasmitir un deseo de relacionarse, que no siempre refleja buenas intenciones (sobre todo si hace en un movimiento lento). Una cola erecta significa dominio; si está baja, relajación, que no es lo mismo que entre las piernas o curvada, donde está demostrando temor o sumisión.

En ocasiones hemos contribuido a limitar estas facultades expresivas, por ejemplo con los cortes estéticos de orejas o de cola, disimulando parte de sus recursos comunicativos y dificultando también la comunicación con sus propios congéneres. La cría selectiva realizada en el correr de los siglos ha hecho en algunas razas que un pelo excesivamente largo o unas orejas colgantes hayan modificado asimismo sus posibilidades de comunicación.


El lenguaje corporal canino:
Posturas que hablan por sí mismas

Un perro agachado con las patas delanteras extendidas y la espalda curvada está invitando a jugar: cuando está en una postura sumisa es frecuente que se gire para mostrarnos sus partes vulnerables. Si el cuerpo está tenso, muestra los dientes con las orejas hacia atrás y mantiene la cola rígida es que tiene miedo, si la cola está erecta, las orejas hacia arriba y los dientes al descubierto mostrando incluso los incisivos, está preparado para atacar. Un perro relajado y feliz lleva su cola sin tensión junto al cuerpo, con sus mandíbulas descontraídas, moviéndose libremente con la cabeza en alto.

Nuestros perros son animales domesticados, pero continúan comunicándose como sus antepasados los lobos. Las señales olfativas les permiten identificar a los individuos. Los perros tienen glándulas que secretan determinadas sustancias olorosas que les permiten diferenciarse del resto.

La orina es otro mecanismo con el que cuenta esta especie para marcar un territorio y poner su sello de identidad. Las hembras también utilizan este instrumento para anunciar a la comunidad su deseo de aparearse. Las señales auditivas constituyen otro importantísimo recurso comunicativo. Los ladridos de diferente tonalidad permiten comunicar un saludo, una advertencia, un deseo de jugar, una petición de auxilio.

Fuente: www.facilisimo.com