No quiero que mi perro sea agresivo ¿Cómo evito ésto?

Tener un perro implica mucha responsabilidad, no solo de sus cuidados físicos sino también de sus comportamientos. Con frecuencia las personas se preocupan por educar a sus perros de tal forma que la agresividad no haga parte de su comportamiento normal.

Pero hay que tener en cuenta que los caninos son territoriales y agresivos por naturaleza al ser descendientes de los lobos. Aunque estas características estén en sus genes, no quiere decir que no podamos entrenarlo y educarlo para que pueda convivir con otros de su especie y con personas que sean desconocidas.

Como amos es importante evitar que nuestro amigo canino sea un peligro para los demás. Es importante que nuestro perro se acostumbre a la convivencia social, esto se hace mediante caminatas, idas a parques y a lugares donde pueda interactuar con otros animales y personas diferentes a las que conoce. De esta manera el perro aprenderá cómo comportarse ante la presencia de gente y otros perros.

Es importante que desde pequeños tengan claro qué pueden morder y qué no, los perros son depredadores por naturaleza, como ya mencionamos anteriormente, descienden de los lobos, la  mordida es fundamental para ellos. Esto se puede lograr por medio de juguetes y evitar que muerda otros objetos y personas, en caso de que intente hacerlo es necesario que lo corrijamos y centremos su atención de nuevo hacia el juguete. De este modo irá aprendiendo que no todo se puede morder.

Los perros, como todas las criaturas, sienten y responden según el trato que reciben. Un perro que constantemente es maltratado se convertirá en un animal agresivo e histérico.

No olvides cuidar, respetar y tratar bien a tu perro, recuerda que él no te eligió como su amo, pero tú puedes decidir la forma en que lo educas y lo tratas.